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24.10.05

La persecución de los cristianos en Egipto

¿Es posible que los musulmanes acepten convivir pacíficamente y en igualdad de condiciones con otras religiones? Si la historia no miente la convivencia pacifica solo es un mito, creado por una Europa doblegada a las continuas exigencias de los musulmanes, y sin tener en cuenta que la reciprocidad no existe.

La persecución cristiana es prácticamente universal en el mundo musulmán. Hay países extremistas en este terreno, como Arabia Saudita, donde ya no existen cristianos, o como Sudán, donde existen muchos cristianos pero el proceso de exterminio está muy avanzado. Y hay países mucho más moderados, como Egipto, donde los cristianos sobreviven como ciudadanos de segunda o tercera, pero sobreviven… O al menos sobrevivían hasta que la creciente ola de radicalismo fundamentalista los está poniendo en inminente peligro de extinción. Y de nuevo, Egipto, es un ejemplo al respecto.

Toda la semana pasada la comunidad entera de cristianos de Egipto se vio sometida a toda clase de ataques y acosos. Y especialmente reseñable al respecto fue la manifestación musulmana anticristiana que se saldó con cuatro muertos e importantes destrucciones materiales.

LOS DISTURBIOS

Desde hace una semana, la comunidad copta-cristiana de Alejandría, en la costa mediterránea de Egipto, está sufriendo violentos ataques y amenazas por parte de grupos de islamistas, que dicen sentirse ofendidos por la proyección de un DVD en la que se recoge una obra de teatro en la iglesia de San Jorge, y donde se muestra a un joven cristiano que tras convertirse al Islam se siente decepcionado.

La noche del viernes al sábado pasado, se incrementó la violencia saldándose con la vida de cuatro personas, entre ellas dos policías, y más de noventa heridos. Los disturbios comenzaron a desatarse después del rezo comunitario del mediodía en la mezquita «Aulad Al Shej», cuando cerca de 5.000 musulmanes se dirigieron al templo cristiano de San Jorge e intentaron entrar en él, pero las fuerzas de seguridad, que custodiaban la iglesia desde el pasado miércoles para prevenir enfrentamientos, les impidieron la entrada.
Entonces, los manifestantes lanzaron piedras contra la policía y los viandantes, y los agentes antidisturbios respondieron con gases lacrimógenos y cargas. A partir de ahí, los disturbios se extendieron a toda la ciudad. Al final del día los fanáticos musulmanes habían atacado cuatro iglesias y 145 tiendas de cristianos

El sábado, todavía se podían ver en la avenida principal del barrio los restos de un coche policial quemado, así como una tienda de bebidas alcohólicas también calcinada por los manifestantes. A primeras horas de la mañana ya se habían detenido 60 personas implicadas en destrozos de propiedades y miles de policías de uniforme y de civil habían tomado el barrio de Muharram Bik, donde se ubica la iglesia de San Sergio.

El mismo sábado, los cristianos de Alejandría interrumpieron todas sus actividades comerciales y hasta escolares tras los disturbios del viernes. Los numerosos comercios cristianos del barrio de Muharram Bik y de otros barrios de esta ciudad mediterránea de cuatro millones de habitantes no abrieron, y las familias cristianas no enviaron a sus hijos a las escuelas o las universidades por temor a ataques.

“La situación es muy grave, hay una crisis en todo Egipto -dijo a EFE el párroco Yohana Nasif, portavoz de la Catedral, el pasado sábado-; anoche las cosas se salieron totalmente de control (..) hay una organización extremista que está atizando el odio anticristiano desde una página web en la que llaman a extremistas incluso de fuera de El Cairo''. Y efectivamente, en un comunicado publicado en Internet, el grupo islamista Muyahidines de Egipto urgió a sus seguidores a que inicien una guerra santa contra los cruzados.

El representante de la Iglesia Copta de Alejandría, el padre Augustinous, ha acusado a la Prensa de incitar a la discordia, al haber aireado la noticia sobre la obra que se proyectó hace dos años en el marco de la campaña contra el terrorismo.

Por otra parte, cristianos de todo Egipto (que son alrededor del diez por ciento de la población) han comenzado a intercambiar mensajes telefónicos en los que se animan para unirse en oración y leer una parte de la Biblia en la que se invoca la protección de Dios.

EL ORIGEN DE LOS DITURBIOS

El origen de toda esta tensión son los rumores originados por la supuesta proyección de la grabación de una obra de teatro donde se contaba la historia de un joven cristiano convertido al islam y luego empujado por unos extremistas a cometer atentados terroristas hasta que se arrepiente y vuelve a su religión.

La obra fue representada hace dos años, pero algún joven la grabó en vídeo y ahora circula en forma de DVD. Algunos periódicos sensacionalistas y páginas web de radicales islámicos se han hecho eco del vídeo asegurando que "ofende al islam" y han llamado a protestar contra la iglesia de San Sergio, donde el primer momento que se representó la obra.

Prácticamente nadie de los entre tres y cinco mil manifestantes habían visto el video de la obra. Pero según afirman espectadores de la misma, la obra es propagandística a favor del cristianismo, pero absolutamente respetuosa en la crítica del Islam.

LA DISCRIMINACIÓN

Los cristianos coptos poblaban Egipto cuando llegaron los musulmanes, en el siglo VII, y desde entonces su número ha ido descendiendo hasta el diez por ciento actual.

Sobre una población de 70 millones de habitantes, un 10% son coptos (7 millones), y un 3 ó 4% (algo más de 2 millones) de cristianos de otras denominaciones. Estas cifras tienden a ser disminuidas tanto por el Gobierno egipcio como a causa de que los cristianos convertidos clandestinamente, por lo que mantienen un nombre árabe para intentar no ser discriminados y que inevitablemente son contabilizados como árabes.

Hasta ahora, los episodios violentos contra las comunidades cristianas habían sido esporádicos, aunque los cristianos son ciudadanos de segunda categoría en Egipto.

Sin embargo, la actual explosión de violencia y su carácter teledirigido, revela el deseo de los sectores fundamentalistas de acabar con prácticamente la única comunidad cristiana importante y floreciente que sobrevive en el seno del Islam.

LA PERSECUCIÓN

En Egipto, los cristianos tienen vetados una serie de puestos en la política, la Administración y el ejército, e incluso profesiones como la de ginecólogo.

En Egipto, un cristiano que se convierte al Islam puede cambiar sus papeles de identificación, añadiendo su nuevo nombre musulmán en 24 horas. Pero no hay un procedimiento recíproco para un musulmán que se convierta al cristianismo. Se les requiere a todos los ciudadanos que incorporen en su tarjeta de identificación si son cristianos o musulmanes, lo cual es una forma de “marcar” a los cristianos.

Los musulmanes que se convierten al cristianismo y no cambian sus nombres se ven forzados a vivir una doble vida. Se convierten y conservan sus nombres musulmanes... van a la Iglesia y toman la comunión, pero cuando salen de la Iglesia, se comportan como los clásicos musulmanes.

El mayor obstáculo es conseguir el permiso para construir iglesias. Un decreto de 1856, que se remonta al Imperio Otomano, hace necesario todavía que se obtenga un decreto presidencial para reparar, remodelar o construir un lugar de culto. Un decreto de 1934 del Ministro del Interior añadió más de 10 condiciones a la ley de 1856. Entre ellas, el no permitir que se construya una iglesia a menos de 100 metros de una mezquita, requiriéndose el permiso del edificio oficial cuando la construcción esté cerca de dicho edificio, y requiriéndose también que ninguno de los vecinos musulmanes se oponga a la construcción.

Otro tema problemático tiene que ver con los nombres dados a los niños. Los jóvenes con nombres musulmanes son apuntados automáticamente en clases de religión islámica, sin importar las creencias de sus padres. En cambio los niños con nombres coptos tradicionales corren el riesgo de una vida de discriminación.

Según relata Zenit en los últimos años se desató una guerra de pegatinas cuando los cristianos empezaron a poner una pegatina con el símbolo del pez, y fueron contestados por los musulmanes con una pegatina de un tiburón, simbolizando su actitud hacia los cristianos con la de los tiburones hambrientos de peces.


Fuente: edicionescatolicas.com
Fecha:24/10/05

2 comentarios :

  1. Anónimo6/6/08

    ME PARECE QUE LOS MUSULMANNES SON LOS MAS INTOLERANTES DE LA RAZA HUMANA Y SI SON ARABES SON UNOS SOBERBIOOOS NO IMPORTA EN EL APOCALIPSIS TODOS LOS MUSULMANES DEJARAN DE EXISTIR ASI NNO HABRA GENTE PROBLEMATICA EN ESTE MUNDOO

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  2. Anónimo6/6/08

    TIRAREMOS PIEDRAS Y QUEMAREMOS BANDERASS ARGELIANAS FRENTE A LA EMBAJADA DE ARGELIA ,MARRUECOS ,IRAN ARABIA SAUDI E INDIA.

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