La Nueva Identidad Europea, "Belgomusulmana"

La primera escuela islámica de secundaria de Bélgica abre sus puertas sin aval oficial.

El centro surge como respuesta a la creciente prohibición del uso del velo en las escuelas

La idea flotaba en el aire desde hacía tiempo en las reuniones de la Liga de Ayuda Mutua Islámica de Bruselas: contar con un instituto de secundaria propio, respetuoso con la cultura musulmana y sus costumbres.
La creciente prohibición del uso del velo en las escuelas belgas ha sido el argumento definitivo para que la asociación decidiera, el pasado mayo, poner en marcha el primer instituto islámico del país. Con cierta improvisación, el centro abrirá sus puertas el 12 de septiembre en Molenbeek, un distrito bruselense de mayoría inmigrante, que alberga algunos focos de radicalismo islamista.

"Vamos a ser una escuela abierta, no queremos convertirnos en un gueto", aclaró el secretario general, Mohamed Musa, en el vetusto edificio donde se impartirán las clases, y que alberga además una mezquita.
Por el momento, funcionará al margen del sistema educativo oficial.
No han solicitado el reconocimiento y, por lo tanto, su diploma no tiene ninguna validez. Para hacerse con la titulación, los alumnos deberán examinarse a final de curso ante un tribunal de la comunidad francófona.

"No hemos presentado demanda de reconocimiento porque es muy difícil que la concedan antes de empezar a funcionar, pero más adelante lo haremos", explicó Musa, que no cree que este detalle pueda frenar a algunas familias. La escuela promete que el eje de su enseñanza será "la construcción de una identidad belgomusulmana, una ciudadanía alimentada de espiritualidad".

Niños y niñas estudiarán francés, neerlandés, matemáticas y el resto de materias que se cursan en las escuelas belgas convencionales.
Además, tendrán dos horas adicionales a la semana para el estudio del islam y la lengua árabe. "Por lo demás, el programa es el mismo", insistió Musa.

Pero algunos detalles todavía no están claros. Por ejemplo, si chicos y chicas asistirán juntos a las clases de educación física. "Dependerá del profesor, no lo hemos discutido aún". ¿Habrá educación sexual, como en las escuelas belgas? "Creo que sí, en la clase de Conocimiento del Medio". ¿Pausas para rezar? "No lo hemos hablado todavía, lo que demuestra que no es una prioridad para nosotros".

La falta de reconocimiento impide además que el centro reciba ayudas oficiales. A las familias se les pide una "participación" de 1.800 euros al año, un precio más bien alto para las familias del barrio; el resto de gastos se cubren gracias a la solidaridad de la Liga de Ayuda Islámica.
Por ahora, una veintena de familias han matriculado a sus hijos. El objetivo es llegar a los 40 alumnos este curso. En la vecina Holanda existen 43 centros de enseñanza islámicos con reconocimiento oficial, pagados por el Estado.

Se denomina Escuela Avicena, por el filósofo persa que en el siglo X tendió puentes entre la cultura oriental y la occidental. Existe ya una escuela de primaria musulmana en Bruselas, reconocida y con ayudas oficiales. Sin embargo, la apertura de un centro de secundaria no ha sido bien recibida. Existe el temor de que aumente el aislamiento de la comunidad musulmana.

"Si la sociedad fuera de verdad multicultural, el hecho de que tengamos unas creencias determinadas no debería ser un problema - explicó Mohamed Musa-. Para nosotros no lo es que el resto las tenga".

Bélgica, donde viven unos 400.000 musulmanes, ha debatido la posibilidad de vetar por ley el uso del pañuelo islámico en las escuelas, al estilo de Francia, pero la decisión última depende de cada centro.
El ayuntamiento de Amberes, como el de Bruselas, prohibió a sus funcionarias que trabajan de cara al público que utilicen el velo islámico. Aunque la mayoría de mujeres se han adaptado a la norma (algunas han cambiado de puesto), con las trabajadoras de una guardería el Ayuntamiento tuvo que negociar. Como solución de compromiso, las musulmanas pueden utilizar pañuelo para cubrirse la cabeza dejando el cuello al descubierto.

Beatriz Navarro
Corresponsal Bruselas

Resultaría paradójico que Bélgica pueda considerar oficialmente adoptar el sistema educativo que ha sido un autentico fracaso en Holanda.

Los políticos de toda Europa hablan hasta la saciedad de integración. ¿Como se puede forjar una integración satisfactoria de los inmigrantes si se permite que desde pequeños se aíslen en centros culturales marcadamente diferenciales en cuanto a la enseñanza, a los hábitos y a la asimilación de los valores?
A continuación de la escuela estos jóvenes regresan a sus guetos con sus familias, y así, de esta forma viven en Europa ajenos a los valores europeos, el aislamiento que se produce es el culpable de de conflictos comunitarios, del racismo y de la marginalización social.

¿Con semejantes características como pueden integrarse? ¿Quién espera que la integración sea una realidad? ¿Los propios inmigrantes desean que sus hijos se integren en una sociedad corrupta y amoral? [La opinión mas afable que tienen de la sociedad que los acoge, más claro, de occidente]

Solo Europa y su fracasada política de apaciguamiento es capaz de creer en lo insostenible, el futuro esta anunciado y Europa tal como la conocemos desaparecerá por meritos propios.

Monmar

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