Los musulmanes niegan que agredieran a los agentes en la Mezquita de Córdoba.
* Los implicados han negado que llevaran ningún cuchillo
* Aseguran que el ambiente les llevó a orar
* Hay ocho personas imputadas por desórdenes públicos
Los turistas musulmanes austríacos que el miércoles protagonizaron unos incidentes en la Mezquita de Córdoba han lamentado lo ocurrido y han asegurado que en ningún caso querían ni provocar ni ofender a la religión católica, al tiempo que niegan que hubiera habido agresión a los agentes.
Según ha declarado un portavoz de los turistas, que no ha querido dar a conocer su identidad y que es uno de los seis imputados por el juez en estos hechos y por los que también están detenidas otras dos personas, durante lo ocurrido no intentaron "herir los sentimientos religiosos de nuestros hermanos cristianos".
Ha añadido que en Austria el grupo del que forma parte participa en la organización de "diálogos y rezos interreligiosos", por lo que ha negado cualquier tipo de intencionalidad cuando, según ha explicado, sólo la mitad de los 118 turistas, se pusieron a rezar bajo el rito musulmán en la Mezquita cordobesa.
No pensaron en las consecuencias
Según ha narrado, cuando este grupo entró en el templo "el ambiente espiritual que allí se respiraba" les llevó a orar. "Fue un acto espontáneo. Tenemos mucho respeto por la religión católica y tenemos muy buenas relaciones con la juventud católica en Austria".
El portavoz ha dicho que nunca pensaron que su acto tendría tantas consecuencias, por lo que ha añadido que el grupo de turistas siente mucho que se haya entendido su acción como una provocación.
Además, ha negado rotundamente que alguien del grupo atentara o provocara a policías y agentes de seguridad, y ha agregado que en ningún momento algún miembro del grupo utilizara un cuchillo de grandes dimensiones, tal y como se recoge en el acta de la policía al que tuvo acceso Efe.
'Walkies' para no pagar móviles
También ha explicado que el uso de los 'walkie-talkies', que fueron intervenidos por la Policía, responde a que tenían que comunicarse entre ellos sin que les cueste llamar con un móvil austríaco en un país extranjero.
Ha indicado que el grupo ha llegado a España porque "ama tanto a este país como a su gente", y ha añadido que se siente "muy bien tratado" en él hasta el punto de que desean volver
Por otra parte, el portavoz ha explicado que tienen mucha confianza en la justicia española y que esperan que tomen la decisión correcta, así como que desea la libertad para sus dos compañeros detenidos, para los que el titular del juzgado de Instrucción número 4 de Córdoba ha prorrogado hasta este viernes su detención. Están imputados, junto a otras seis personas, de desórdenes públicos.
El juez asegura que el altercado en la Mezquita fue intencionado por parte de los musulmanes
El Juzgado de Instrucción número 4 de Córdoba ha puesto en libertad con cargos a los dos turistas musulmanes, M.S. y E.G., detenidos el miércoles tras protagonizar un altercado en la Mezquita-Catedral y en el que presuntamente hirieron con un cuchillo a un vigilante de seguridad.
Según el auto del juez José Luis Rodríguez Lainz, a M.S. se le imputan los delitos contra el sentimiento religioso, desórdenes públicos, lesiones pendientes de calificación, amenazas y atentado contra agentes de la autoridad.
De momento, el juez, que ha decido retirarle el pasaporte de Sri Lanka, no imputa a M.S. un delito de homicidio en grado de tentativa, ya que, aunque indica que las lesiones son "reales" y han sido relatadas por testigos, estima que la acción agresiva no puede tildarse en este momento procesal como de tentativa de homicidio.
Las lesiones "son reales", según el juez
Al resto de los implicados, N.M., Z.E., H.K., O.A, H.B., M.K. y E.G. -que también fue detenido y ha quedado en libertad provisional-, el juez les imputa delitos contra el sentimiento religioso, amenazas y atentado contra la autoridad.
Según relata el juez en el auto, Z.E. lideraba un grupo de 118 turistas de religión musulmana, aunque de distintas razas y procedentes de Austria, que "idearon una estrategia" de entrar en la Mezquita Catedral de Córdoba "aprovechando el horario de visitas de turistas", aunque en ese momento en el templo se estaba desarrollando un acto litúrgico "de exposición al Santísimo" con motivo de la Semana Santa.
El magistrado indica que este grupo de turistas accedió al templo con la "intención" de organizar un rezo de grupo bajo el rito musulmán, "a sabiendas de que tal acto de expresión religiosa se encontraba expresamente prohibido".
Imágenes de las cámaras de seguridad
Según las imágenes de las cámaras de seguridad, que han sido visionadas por el juez en torno a las 17.30 horas del pasado miércoles, los turistas entraron en la Catedral en pequeños grupos de dos y tres personas "con claro disimulo" e "interconectados visualmente y con walkie-talkies" reuniéndose en un lateral de la Mezquita, donde comenzaron a rezar arrodillados.
Mientras este grupo rezaba, cinco de los turistas permanecieron de pie junto al líder para "garantizar su seguridad y libertad de movimiento".
A los diez minutos de que comenzaran sus rezos, uno de los agentes de seguridad privada del templo solicitó al líder que dejaran de orar, sin que pudiera acercarse a él al impedírselo cuatro de los turistas.
Intentaron quitarle la pistola
Según el auto, uno de ellos que se encontraba protegiendo al líder le dijo que hablarían cuando terminaran de rezar, momento en el que el vigilante, tras advertirles hasta en dos ocasiones de que el rezo bajo el rito musulmán está prohibido en el templo, se produjo un forcejeo en el que el vigilante recibió un puñetazo en la cara.
Tras este suceso, el vigilante, que se deshizo de las personas que le agarraban, fue en busca del presunto agresor y consiguió inmovilizarlo, momento en el que M.S. y principal imputado en este caso sacó una navaja de diez centímetros de hoja y cuatro de ancho con la intención de amedrentar al vigilante y lanzó una cuchillada a la zona del pecho.
Al intentar evitar la agresión, el vigilante resultó herido en la mano izquierda, mientras que otro de los implicados, N.M, intentó arrebatarle la pistola a otro de los vigilantes, que también presenta heridas leves.
Los vigilantes también han declarado
Además, E.G., que fue el segundo detenido, pegó con una muleta a uno de los quince policías nacionales que se desplazaron al templo para intervenir.
A pesar de que el Ministerio Fiscal ha solicitado la imposición de una fianza de 3.000 euros para M.S., el juez ha considerado que esta medida cautelar no garantiza que el imputado "pueda decidir no fugarse por la sola razón de perder tal suma" y, por lo tanto, estima más adecuada la retirada del pasaporte que sí garantiza que el imputado no pueda abandonar el territorio comunitario.
Este viernes por la mañana han declarado ante el juez los dos vigilantes que supuestamente fueron agredidos y el jefe de seguridad de la mezquita-catedral.
El Mundo.es
Liberados los dos detenidos por "la provocación" en la mezquita de Córdoba
Un grupo de turistas trató de orar allí por el rito musulmán.- Dos de ellos mantuvieron un forcejeo con las fuerzas del orden.- El Ayuntamiento califica los hechos de "provocación"
El Juzgado de Instrucción número 4 de Córdoba ha puesto en libertad con cargos a los dos turistas musulmanes, E.G. y M.S., detenidos el pasado miércoles tras protagonizar un altercado en la mezquita de la ciudad, donde intentaron, junto a un nutrido grupo de turistas del mismo credo, un rezo colectivo en el templo cordobés. El incidente ha indignado a la ciudad, cuyo Ayuntamiento ha tildado los hechos de "provocación", mientras el Obispado ha asegurado, en sintonía con el juez, que fue un acto "perfectamente organizado".
A M.S. se le imputan delitos contra el sentimiento religioso, desórdenes públicos, lesiones pendientes de calificación, amenazas y atentado contra la autoridad y se le ha retirado el pasaporte de Sri Lanka. Al identificado como E. G. el juez le acusa de atentado contra la autoridad, delito contra el sentimiento religioso, amenazas y desórdenes públicos, han informado fuentes judiciales.
Además, a otras seis personas del mismo grupo de musulmanes procedente de Austria, que no fueron detenidas, se les imputa un delito de desórdenes públicos. Este viernes declararon ante el juez los dos agentes que supuestamente fueron agredidos y el jefe de seguridad de la mezquita. El juez considera que los cabecillas del grupo "idearon una estrategia" para entrar en la mezquita cordobesa con la intención de organizar un rezo de grupo bajo el rito musulmán "a sabiendas de que tal acto de expresión religiosa se encontraba expresamente prohibido".
El incidente se produjo a las 19.30 del pasado miércoles, cuando el grupo de turistas se arrodilló y se puso a rezar bajo el rito musulmán en el interior del templo, junto a la puerta de Las Palmas, momento en el que agentes de seguridad privada les advirtieron en dos ocasiones de que no era posible la oración. Ante la actitud violenta de dos de ellos, alertaron a la policía. Los agentes fueron recibidos con amenazas, según consta en la denuncia policial. Dos resultaron heridos leves en un forcejeo.
El Obispado de Córdoba emitió un comunicado el miércoles en el que acusaba al grupo de 118 turistas de "provocar de manera organizada un reprobable episodio de violencia". La Junta Islámica lamentó el incidente, pero insistió en que se debe permitir el culto compartido. El Ayuntamiento de Córdoba ha hecho público un comunicado en el que considera los hechos "una provocación que no tiene cabida en nuestra ciudad, caracterizada por su talante de diálogo intercultural e interreligioso". Para el Ayuntamiento de la capital, acciones como la del miércoles pasado evidencian que sus organizadores, "lejos de respetar la libertad del individuo por una confesión u otra, pretenden imponer con la violencia y la intransigencia una forma particular de entender la religión".
Uno de los turistas ha señalado a Efe que sólo la mitad del grupo se puso a rezar, y sin intención de "herir los sentimientos cristianos". La Juventud Musulmana de Austria (JMA) ha pedido disculpas y ha lamentado los incidentes en la Mezquita, pero al mismo tiempo ha criticado la "agresividad" y el "uso desproporcionado de la fuerza" por parte de la seguridad privada y la policía española. "La seguridad privada fue muy agresiva, grosera y desproporcionada. Rezar fue un error, pero eso no justifica cómo nos trataron. A uno de los jóvenes le llegaron a decir en inglés: 'Esto es una guerra y te vamos a matar'", explicó a Efe Alexander Osman, portavoz de la JMA y testigo del altercado
La mezquita de Córdoba fue convertida en catedral en el año 1236 y la Iglesia católica no permite el uso compartido.
El País.com
Si las leyes se aplicasen con rigor en este país el islam sería considerado secta destructiva y el corán prohibido por contener apología del genocidio, de la xenofobia, homofobia y misoginia a mansalva. Por desgracia nuestros políticos han optado por entregar a los ciudadanos europeos al holocausto con esa grandísima idiotez de la alianza de civilizaciones. Esto acaba en guerra; esperemos solo que estalle antes de que nos superen diez a uno. Lo cual parece, será muy pronto a la vista de la velocidad a la que nos están invadiendo.
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