MERITXELL M. PAUNÉ | Barcelona | 10/09/2010 | Actualizada a las 13:47h | Internacional
Berlín. (Agencias y redacción).- La clase política alemana respira aliviada este viernes tras el anuncio anoche de su renuncia voluntaria como miembro del consejo del Bundesbank de Thilo Sarrazin, protagonista de una fuerte polémica por sus tésis negativas sobre la inmigración de origen musulmán y su supuesta amenaza para la sociedad.
El economista Thilo Sarrazin firma copias de su libro 'Alemania se desintegra' en el Nikolaisaal de Potsdam (Alemania) / EFE / Bernd Settnik
Mientras tanto, su libro Deutschland schafft sich ab (Alemania se desintegra) se ha convertido en un éxito de ventas y, tan solo una semana después de su edición, ocupa el segundo lugar en la lista de ventas de las publicaciones de ensayo del semanario Der Spiegel, mientras la primera edición de 250.000 ejemplares se encuentra prácticamente agotada.
Dice que quiere promover el debate
Los medios de comunicación alemanes han discutido intensamente esta semana si el Bundesbank y el SPD deberían expulsarle por airear sus argumentos racistas o si, por el contrario, deberían permitirle ejercer su libertad de expresión, puesto que su libro no llama a ninguna acción y expulsarle multiplicaría su popularidad. Sin embargo, el simple hecho de protagonizar el debate mediático ya le han catapultado ante la opinión pública y su estratégica renuncia ha culminado su visibilidad y ha despertado la curiosidad de los lectores por su libro.
Sarrazin promete dar guerra y en la presentación del libro retó a sus opositores a debatir su argumentación: "Les invito a todos a encontrar incoherencias en mi análisis", dijo el ex senador de Finanzas de Berlín. El prestigioso semanario Der Spiegel recoge su declaración y advierte que "no será fácil" silenciarle, puesto que como él mismo dijo está más que dispuesto a hablar de su posicionamiento: "Soy un optimista estructural y creo en el discurso público. Si no fuera así, no escribiría este libro". "Amplios sectores de la población también tienen derecho a participar en la toma de decisiones y no conformarse con estadísticas abstractas", remató Sarrazin.
El Bundesbank aceptó la dimisión al instante
Sin embargo, expertos germanos en derecho constitucional coincidían en señalar que la destitución de Sarrazin tenía escasas posibilidades legales y que un recurso ante los tribunales del interesado tendría prácticamente el éxito asegurado, empañando así la autoridad del Presidente de Alemania.
El Gobierno y su partido también le dan la espalda
Sin embargo, por lo que ha expresado hasta el momento, Sarrazin quiere mantener su pertenencia al partido: "Estoy en un partido de masas y me mantendré en un partido de masas, porque creo que estas cuestiones pertenecen a un partido de masas," dijo a periodistas nacionales y extranjeros. En este aspecto algunos miembros particulares del SPD sí que le han respaldado: "Los partidos de masas también tenemos que tratar temas desagradables, incluso irritantes y molestos", dijo Heinz Buschkowsky, alcalde del distrito de Berlín-Neukölln -donde vive mucha inmigración turca- al canal de televisión Phoenix.
Al anunciar su dimisión del Bundesbank, Sarrazin declaró haber sufrido "presiones masivas" las últimas semanas y comentó que había reflexionado sobre si merecía la pena "enfrentarse a toda la clase política alemana. Una situación así no la aguanta nadie a la larga". Asimismo subrayó que previamente al anuncio de su dimisión, sus compañeros en el consejo del Bundesbank habían retirado las acusaciones en su contra y la solicitud de su cese presentada ante el máximo mandatario alemán el pasado 2 de septiembre.
El presidente del Consejo Central de los Musulmanes en Alemania (ZMD), Ayyub Axel Köhler, calificó a Sarrazin de "la personificación de lo feo alemán" y aseguró que "sus expresiones racistas e inhumanas han infligido un daño grave y duradero" entre su comunidad. "Sarrazin lo intenta, es un populista y apela a los más bajos instintos de la población", dijo Koehler.
Parte de los alemanes respaldan sus tesis
Pese a todo, Sarrazin ha encontrado un amplio respaldo a sus tesis entre la mayoría de la población alemana, según coinciden en destacar todas las encuestas realizadas sobre sus planteamientos, así como el apoyo abierto de medios poderosos como el tabloide sensacionalista Bild. Es el mayor diario de Europa, con una tirada de 3 millones de ejemplares diarios, y lleva varios días haciendo una campaña abierta en favor del que fuera senador de Finanzas de la ciudad-estado de Berlín.
Sarrazin lleva prácticamente una década envuelto en el escándalo por sus declaraciones y tesis en las que critica la deficiente integración de los inmigrantes de origen musulmán, pero también a quienes abusan del generoso sistema social germano. Sus más recientes críticas a los musulmanes, pero sobre todo sus afirmaciones de que "los judíos al igual que los vascos" tienen un gen característico, fueron el desencadenante de la polémica que condujo a la petición de su cese por los restantes miembros del consejo del Bundesbank. Su otra tesis estrella es el desequilibrio en la natalidad. Según él, la baja tasa entre los nativos alemanes y la mayor natalidad de los extranjeros amenaza la supervivencia de la nación alemana: "El pueblo alemán es una simple cuestión numérica, en camino a su propia extinción".
.El Libro que ataca al Islam es el segundo más vendido de la década en Alemania
BERLÍN.- El libro "Alemania se desintegra", del ex directivo del Bundesbank Thilo Sarrazin, que ha sido considerado islamófobo, se ha convertido en el segundo libro de no ficción de contenido político más vendido de la década en Alemania, detrás de "Stupid White Men", de Michael Moore.
Así lo informó la organización "Media control", tras una revisión especial de las cifras de libros más vendidos de los últimos diez años.
"Media control" no comunicó las cifras exactas de ventas pero indicó que el libro de Sarrazin, aparecido en agosto pasado, ya se ha vendido más que el best-seller "Ausser Dienst" del ex-canciller alemán Helmut Schmidt.
En su libro, que lleva el subtítulo "Como ponemos nuestro país en juego", Sarrazin -que durante su etapa como senador de Finanzas de Berlín había levantado ampollas con frecuentes afirmaciones escandalosas- dibuja un escenario apocalíptico en el que pronostica una islamización de Alemania en el curso de las próximas décadas.
"No quiero que el país de mis nietos y biznietos sea un país mayoritariamente musulmán, en el que se hable árabe y turco predominantemente, en el que las mujeres lleven el pañuelo islámico y en el que la vida cotidiana esté marcada por la llamada a oración del muecín", escribe Sarrazin, del Partido Socialdemócrata (SPD).
Cerca de tres millones de personas de origen turco viven en Alemania y su índice de natalidad es dos veces mayor que el del resto de población.
Sarrazin niega que "los trabajadores turcos y marroquíes" hayan hecho un aporte al bienestar de Alemania, lo que en cambio, dice, sí se puede afirmar sobre los portugueses, los españoles y los italianos.
"En todos los países europeos los inmigrantes musulmanes le cuestan a la sociedad más de lo que aportan debido a su escasa actividad laboral y a los beneficios sociales que reciben", apunta en el libro.
"Desde el punto de vista cultural y civilizador, las concepciones sociales y los valores que representan son un retroceso. Demográficamente, la fertilidad de los inmigrantes musulmanes es una amenaza para el equilibrio cultural de una Europa en proceso de envejecimiento", agrega.
Sarrazin levantó gran revuelo con la publicación de su libro, hasta el punto que terminó renunciando a su cargo de directivo del Bundesbank en medio de grandes presiones políticas. El SPD le abrió un proceso de expulsión del partido, aún pendiente de resolución.
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Totalmente de acuerdo con este Sr. Pasa lo mismo en España.
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