Que el resumen, el “donde estamos” de lo que está sucediendo en Estados Unidos y contra Estados Unidos acerca del islam y del islamismo sea la preocupación porque crece la islamofobia es un escándalo. El buenismo no pierde ninguna oportunidad de equivocarse. El relativismo nos deja siempre descolocado. El enemigo nunca está quieto. O le vences o avanza.
No hay más islamofobia en Estados Unidos. Unas cifras que ha hecho públicas un Consejo tan siniestro como el de las Relaciones Americanas Islámicas de Washington, saca conclusiones alcoránicas de preguntas trampa. No es islamofobia que cada vez más americanos tengan una opinión desfavorable del islam (cuatro de cada diez), pues pese a la propaganda socialdemoócrata alrededor del islam jamás ha florecido ninguna sociedad próspera ni libre. El drama es en qué piensan los otros seis americanos.
Tampoco se puede considerar islamofobia, si no estás cegado, loco de odio y de auto-odio por el mundo libre, que el 34 por ciento de los americanos crean que el islam es más proclive a incitar la violencia que otras religiones, pues la realidad no hace más que subrayarlo. Una vez más, aún me parece bajo el porcentaje de la gente que dice pensar así, puesto que siendo la realidad tan evidente, y tan dolorosa, era de esperar que muchas más personas se hubieran dado cuenta ya de cómo son las cosas en realidad.
Este Consejo claramente propagandista pone también el grito en el cielo por el creciente número de americanos (26 por ciento) que cree que las mezquitas deberían ser vigiladas por las agencias de seguridad. Esas mezquitas en que se predica el odio contra Occidente y se llama a destruir nuestra vida libre y a nosotros mismos. Lo mínimo es vigilarles, ¿no?. No crece la islamofobia en América. Crece la información y la cultura general.
Así las cosas, tener la tremebunda jeta, y la enorme mala leche de acusar a los americanos de islamófobos y que el debate sea si son unos racistas me parece a todas luces inaceptables. No hay racismo alguno, ni odio a nadie por ser como es.
Es en cambio una excelente noticia que América haya tomado nota de sus peligros. Que haya identificado correctamente quién es el enemigo. Que tantas muertes, tantísimas muertes hayan servido al fin para que un pueblo haya empezado a reaccionar contra los que quieren destruirle. Y no sólo lo que América es, sino la idea de libertad que representa, y con la que lleva 3 siglos iluminando al mundo.
El Mundo.es
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si claro todo eso lo del 9/11 y todo lo que pueda inculpar al islam y darnos mala imagen es gracias a los sionistas de sion quienes controlan los norteamericanos
ResponderEliminarAnónimo,ja, fuiste a tocar "el tema" precisamente yo dudo mucho de la versión oficial.Si bien es cierto que los aviones se pudieron estrellar,yo creo que tuvo que haber una "ayudita extra".En resumen:se quiso que pareciera un accidente,¿el pearl harbor del sxxi?...
ResponderEliminar¿Te das cuenta que el Windsor de Madrid tb ardió en llamas y no se vino abajo?Y para que contar lo que se estrellócontra el pentágono..
No me explayaré mas..pero creo que hay muchos que tb dudan de la versión oficial.
Un saludo.