Suecia refuerza la seguridad por la caricatura contra Mahoma.
El conflicto ocasionado hace unos días por una caricatura de Mahoma con cuerpo de perro, publicada en el «Nerikes Allehanda» (NA), diario de Örebro (Suecia), está tomando un grave cariz.
Unos días después de su publicación (el 13 de agosto), considerada «blasfema» e «insultante» por la comunidad árabe, Irán presentó una protesta oficial en la embajada de Suecia de Teherán, en la que exigía que Estocolmo condenara ese dibujo, a su autor, Lats Vilks, y que el citado diario pidiera disculpas públicas.
El conservador Reinfeldt, en las primeras declaraciones de un miembro del Gobierno sobre el tema, se negó a especular sobre qué haría si los países islámicos toman represalias contra Suecia, como ocurrió con Dinamarca en 2006 a raíz de la publicación de unas viñetas de Mahoma en el diario "Jyllands-Posten". "He aprendido a que no hay que pronunciarse sobre algo que no ha ocurrido. Haré todo lo que pueda para mostrar nuestra voluntad de vivir en una sociedad abierta con mutuo respeto, y si de alguna manera puedo recalcar que defendemos esta idea, lo haré", afirmó.
Sin embargo, el jefe del Gobierno de derechas, Fredrik Reinfeldt, que ha recomendado «tranquilidad», dejó muy claro que su Gabinete ni puede ni quiere intervenir en lo que publiquen los medios: «En este país, la libertad de expresión y de prensa es total».
Desde entonces se suceden violentas demostraciones en varias ciudades suecas que culminaron ayer con las realizadas en Örebro, sede del diario.
La protesta oficial de Pakistán tampoco ha tardado en llegar, así como una carta de amenaza a muerte al autor de la caricatura. Y mientras en Karachi un grupo de militantes islamistas, con carteles en los que condenaban a Suecia, quemaron la bandera azul y oro de este reino, y a un muñeco que representaba al primer ministro, Reinfeldt, en la ciudad de Lahore ocurrieron episodios parecidos.
Las embajadas suecas en los países árabes han reforzado la seguridad. Cecilia Julin, jefa de prensa del ministerio de Exteriores sueco, ha comentado que no tiene de momento información alguna sobre las medidas que pueda tomar el Ejecutivo, que sigue cada minuto todo lo que ocurre en aquellos países. Se espera que pronto llegue la recomendación de ese ministerio a los turistas escandinavos para que salgan de aquellas naciones, si no se arregla la situación creada.
Vilks, con una frialdad y parsimonia típicamente suecas, comentó ayer a los medios que ha recibido «no una, sino varias amenazas de muerte» con mensajes parecidos: «Morirás pronto» y «Prepárate para morir». También, que una mujer con acento árabe dejó una frase igualmente amenazadora en su contestador automático. Asegura el artista que aunque tiene más cuidado cuando sale a la calle, no se arrepiente de haber pintado ese can que tanto escándalo e indignación ha levantado entre los islamistas.
Objeto de atención
El redactor jefe del NA, Ulf Johansson, víctima también de amenazas de muerte, no piensa de momento (como hiciera su colega danés Carsten Justen) pedir disculpas por la publicación, que «nunca se hizo con ganas de molestar los sentimientos religiosos de la comunidad árabe».
Johansson no deja de ver el lado propagandístico del asunto y se alegra de que su rotativo ocupe el centro de la atención tanto en el extranjero como en Suecia: «Parece increíble que un modesto periódico de provincias haya llegado tan lejos de nuestras fronteras, a los 57 países de la Conferencia Islámica, y que sea objeto de tanta atención».
La Cámara de Comercio recuerda el boicot a los productos daneses que sufrió la vecina Dinamarca cuando saltó la famosa «Mahoma-krisen» y avisa de que este conflicto también podría traer consecuencias económicas muy graves, lo que supondría pérdidas millonarias.
Al Qaida ofrece dinero por «degollar» a los suecos que publicaron el dibujo de Mahoma
En un comunicado completamente lleno de odio -como es, por otra parte, habitual-, al que acompaña un documento sonoro en la página web de Al Qaida titulado «Ellos proponen, pero Alá dispone», el responsable en Irak de la organización terrorista, Abu Omar al Bagdadi, ha lanzado una «fatwa» contra Lars Vilks y Ulf Johansson, caricaturista y redactor jefe respectivamente del diario sueco «Örebro N. A.».
Al Qaida ofrece una recompensa de 100.000 dólares (71.000 euros) a quien «sacrifique durante el Ramadán a Vilks, que se atrevió a insultar la imagen de nuestro Profeta, que descansa en paz», y 50.000 dólares más a quien «degüelle como a un cordero» a Johansson, responsable de «haber publicado el dibujo blasfemo».
El motivo esta vez de la amenaza, y del renovado enfrentamiento de Suecia con el mundo musulmán, se debe a la publicación el pasado 19 de agosto, en en el citado diario provincial, del dibujo de un perro con la cabeza de Mahoma.
Aunque el mundo islámico tardó varios días en reaccionar -lo mismo que en la «Crisis de Mahoma» danesa, desencadenada por el «Jyllands Posten» en septiembre del 2005-, queda claro que la caricatura ha levantado la furia religiosa.
Nuevas amenazas sangrientas
En la grabación sonora que acompaña a la «fatwa» en Internet, Abu Omar al Bagdadi, además de prometer una nueva ofensiva en Irak contra la minoría étnica yazidí, «para celebrar este santo mes», cita a varios grupos insurgentes de Bagdad y termina el mensaje afirmando que «de ahora en adelante, animaremos a derramar la sangre del dibujante de la caricatura, Lars Vilks».
De poco ha servido de nuevo que el primer ministro, Fredrik Reinfeldt, recibiera a los 20 airados embajadores árabes que pedían explicaciones.
Tampoco ha servido de nada tratar de convencerles de que la libertad de expresión en este Reino es fundamental.
El embajador egipcio, Samah Sotouhi, exigió que Suecia y los implicados pidieran perdón público por la ofensa, algo que ninguno de los implicados están dispuestos a hacer. Por estos motivos, y mientras la inquietud impera en la calle, la Policía de paisano, SAPO, ha tomado cartas en el asunto.
Con sentido del humor
Otra cosa es la redacción del «Örebro N. A.». El autor de la caricatura y su redactor jefe, se han tomado todo el asunto con una admirable entereza, no exenta de sentido del humor. Ambos periodistas han declarado que no quieren aterrorizarse por las amenazas y que piensan seguir trabajando como hasta ahora.
Lars Vilks, el caricaturista, con su reconocido sentido del humor, ha comentado que los 100.000 dólares le parecen poco precio por su vida.
Por su parte, Ulf Johansson el redactor jefe del «N. A.», ha reconocido que tiene «más miedo que antes», pero a la vez ha afirmado que el propósito de las leyes sobre la libertad de prensa es precisamente «proteger contra todo y contra todos esa libertad».
Corresponsal Estocolmo Carmen Villar.
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Cuanto mas cobardes se vuelven los europedos, mas animales se vuelven los del islam.
ResponderEliminarPero el ser cobardes tiene muchas consecuencias nefastas, según Shakespeare:
ResponderEliminar“El cobarde muere muchas veces”.
Sin embargo un proverbio árabe dice: “La crueldad es la fuerza de los cobardes”, en este caso los cobardes son los árabes.
En cualquier caso y por motivos que desconocemos Europa da sobradas muestras de cobardía al comportarse de esta forma ante el peligro.