Unos padres paquistaníes, juzgados por matar a su hija 'demasiado occidental'
Los padres de Shafilea Ahmed, Farzana e Ifitkhar.| Reuters
- El asesinato tuvo lugar en 2003 y había quedado como 'no resuelto'
- La hermana de la víctima delató a su familia en 2010
- 'Le metieron una bolsa de plástico en la boca y la sofocaron', dice
- Los padres se enfrentan a cadena perpetua por asesinato
Durante siete años, Alesha Ahmed guardó el trágico secreto. Esta semana, protegida por una pantalla para no ver la cara a sus padres, la joven de origen paquistaní narró cómo su hermana Shafilea fue asesinada a los 17 años a manos de sus progenitores, Iftikhar y Farzana, y ante los ojos de sus propios hijos por ser "demasiado occidental".
"Le metieron una bolsa de plástico en la boca y la sofocaron", relató Alesha durante el juicio celebrado en Chester, al este de Inglaterra. "Pude ver sus ojos abiertos y cómo se quedaba sin aire. Se orinó encima porque estaba luchando por su vida. Pero ellos la cogieron por la cabeza y le dejaron la bolsa en la boca hasta que dejó de respirar".
El 'crimen de honor' ocurrió en 2003, pero Alesha Ahmed no delató a sus padres hasta 2010. Iftikhar y Farzana Ahmed fueron interrogados varias veces por la muerte violenta de su hija, cuyo cadáver apareció en un solar no muy lejos de su casa. Pero el matrimonio paquistaní detenido brevemente en su día por "secuestro"- había logrado eludir a los investigadores, que habían dado el caso como "no resuelto".
Rebeldía
Iftikhar y Farzana fueron detenidos finalmente hace dos años tras la confesión de Alesha, aunque siguen negando vehementemente el 'crimen de honor'. La hija pequeña asegura que durante todo este tiempo ha vivido "con miedo y traumatizada" por lo ocurrido, y que si decidió delatar a sus padres fue por temor a seguir el mismo camino que su hermana...
"Querían que fuera a Pakistán y habían elegido incluso quién sería mi marido", declaró Alesha, que a sus 23 años ha recordado como la "rebeldía" de Shafilea empezó cuando supo que sus padres tramaban su "matrimonio convenido" y querían enviarle de vuelta a su país.
En el dormitorio de Shafilea, la policía encontró la letra de varias canciones compuestas por la adolescente antes de morir y en las que quedaba muy patente el conflicto con sus padres: "Mi deseo de vivir me quema, pero ellos sólo piensan en el honor. Yo era una chica normal, tampoco pedí demasiado. Sólo quería encajar, pero mi cultura era diferente"...
Intento de suicidio
Shafilea, nacida en Inglaterra, hablaba en urdu con sus padres y cumplía con los ritos musulmanes en su casa, donde vivía con sus padres, tres hermanas y un hermano. Según Alesha, las dos compartían el gusto por el rock, vestían pantalones vaqueros ceñidos y compartían un teléfono móvil donde tenían almacenados varios números de amigos de su clase, lo que provocó la ira de sus padres.
Meses antes de morir, Shafilea llegó a beber lejía, estuvo hospitalizada y sufrió graves heridas en la garganta. En febrero del 2010, se escapó diez días de casa y llegó a confesar a la policía: "Mis padres quieren mandarme a Pakistán para casarme y quedarme allí".
En su declaración de esta semana ante el jurado, Alesha Ahmed confesó que sus propios problemas personales le llevaron a tomar "acciones imprudentes" como el robo orquestado por ella misma en su propia casa... "Pensé que ya no podía más. Me estaba volviendo loca. Al llegar a la Universidad vi que me esperaba lo mismo por lo que pasó mi hermana: no se puede vivir entre dos culturas e intentar complacer a todos".
Durante el juicio, Iftikhar y Farzana Ahmed, inseparables, han negado su implicación en la muerte de "nuestra bella e irremplazable hija". Los dos se enfrentan sin embargo a cadena perpetua por asesinato. Tras los últimos testimonios, el caso quedará visto para sentencia en los próximos días.
Fuente: El Mundo
Entradas Relacionadas
Mejor que se maten entre ellos a que maten a nuestra propia gente.
ResponderEliminarSólo se les debería permitir quedarse en occidente a los que asimilen nuestros valores.
Pero la noticia es triste porque ya no es que se maten entre ellos, es que con esa mentalidad muchas mujeres pierden la vida por tan absurdo código de honor. Y eso es lamentable, sean musulmanas o no.
Eliminar