El Presidente del Instituto Pontifico de Estudios Arabes e Islamicos, P. Justo Lacunza Balda, declara a la agencia Fides sobre la cuestión de los PREDICADORES DEL ODIO:
“¿Quizá soy yo, que he dedicado 30 años de mi vida al estudio de textos islámicos, considerado tambien como un enemigo del Islam?"
Roma – “No se puede dejar espacio a quien alaba el odio e invita a matar. Es una verdadera locura. Es un problema de orden público que el Gobierno deberá afrontar . El uso de espacios institucionales como iglesias, mezquitas, plazas para incitar a la violencia y a la guerra es inadmisible en un país civilizado y democrático”.
Así comenta, en un coloquio con la Agencia Fides el P. Justo Lacunza Balda, Presidente del Instituto Pontificio de Estudios Árabes e Islámicos (PISAI), uno de los mayores expertos católicos sobre el Islam en el mundo, la predicación del pasado Viernes en la Gran Mezquita de Roma.
El imam Abdel-Samie Mahmoud Ibrahim Moussa incitó a “aniquilar a los enemigos del Islam y asegurar en todo el mundo la victoria de las naciones del Islam”.El discurso sacado en el periódico italiano La Repubblica del 7 de junio ha suscitado notables reacciones y una declaración del Ministro de Interior.
El Prof. Lacunza está preocupado por el cariz que pueda tomar la situación: “La libertad religiosa no cuenta. Hay que decir con claridad que la misma Constitución italiana no permite exhortar públicamente la violencia y al odio contra enemigos fantasmales de los que no se indica la identidad.
Lo del viernes no puede ser considerado un incidente sin mas: es un hecho gravísimo, inadmisible en una sociedad democrática. Esto levanta el serio problema de las relaciones entre culturas y religiones en Italia, una cuestión que afecta a la misma convivencia civil en el país.
La invitación a la jihad perjudica a la misma comunidad islámica italiana porque alimenta la cultura de la intolerancia, y produce la sospecha y el rechazo hacia los musulmanes. Me pregunto: ¿quizá soy yo, que he dedicado 30 años de mi vida al estudio de textos islámicos, considerado también como un enemigo del Islam?”
El Porfessor Lacunza afirma estar maravillado del cambio de planteameinto sufrido por la Gran Mequita de Roma donde el precedente imam Mahmoud Hammad Sheweita, entre los pocos que condenaron el atentado del 11 de septiembre, era conocido por la tolerancia, apertura y diálogo y participaba con frecuencia en encuentros interreligiosos.
El Presidente del PISAI señala el problema del nombramiento de los imam en el Centro Cultural islámico Italiano (ante la mezquita de Roma) y de la gestión de la comunidad islámica en Italia en la que tiene un gran peso Arabia Saudita, el Reino de maruecos y la Universidad de Al Azhar en El Cairo.
El Prof. Lacunza desea la condena de palabras y actitudes violentas por parte de las organizaciones islámicas presentes en Italia como el COREIS (Comunidad Religiosa Islámica Italiana) la Liga Musulmana Mundial, la Unión de las Comunidades Islámicas Italianas y otras.
Así concluye: “Deseamos y apoyamos un pluralismo pleno y la libertad política, cultural y religiosa. Pero no se puede dejar que ningún predicador fomente el odio e invite a matar”.
Agencia Fides 12/6/2003
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